miércoles, 16 de diciembre de 2009

30 años antes
ella se levantaba antes que él.
Su día transcurría
tejiendo rezos
sin mirar los puntos
por miedo a desarmarlos.
Completaba sus fantasías
en los cortes de las telenovelas
y luego lavaba las camperas
con olor a bosta de vacas.
Bosta seca.
30 años después
él se levanta antes que ella.
Su día transcurre
desmalezando culpas
con cuchillas sin filos
sobre una pampa sin curvas.
Aprende a acariciarla
envidiando su incapacidad de recordar
y le ordena a la enfermera tirar el pañal
con olor a mierda de su mujer.
Mierda fresca.

martes, 8 de septiembre de 2009

lunes, 24 de agosto de 2009

El miercoles a la 3 de la mañana, chocaron un caracol y una tortuga en Santa Rosa y Jujuy. Cuando llegó la policía encuentró el cuerpo flácido de la tortuga sangrando fuera del caparazón, desparramado contra uno de los cordones. Estaba inconciente. Del otro lado de la vereda, a unos 6 metros, el Cabo Juncos ve el movimiento circular de las antenas del caracol al pasar la luz de su linterna sobre unas bolsas de basura.
- ¿Estás bien? - pregunta observando como la cabeza del animal se asomaba quedando en el centro del circulo de luz. - ¿Que pasó?
El animal hace un movimiento brusco para acomodar sus antenas y dejándose caer le responde:
- No sé, pasó todo muy rápido.

lunes, 20 de julio de 2009

viernes, 19 de junio de 2009

Los rayos de luz que recorrieron años atraviesan los huecos de la persiana.
Rebotan en ella construyéndola, sosteniéndola sobre el fondo negro.
Mi mano recorre el límite que la separa del mundo, la perfecta línea que la atrapa entera.
Delgado borde que contiene la inmensidad apretada en su cuerpo.

Ella duerme o eso creo.
Yo no puedo.

El viento golpea la ventana y un perro ladra, entonces gira y me abraza.
Apoya su cabeza en mi pecho y la mueve marcando la huella donde se acomoda.
Mis dedos rascan su nuca, pacientes, tratando de relajar su mente. Tratando de calmar la mía.
Ahora ella ronca, despacito.
Entonces bostezo y cierro los ojos.

jueves, 30 de abril de 2009


¿El mejor disco de rock de la década?

No, no es relativo.

sábado, 18 de abril de 2009

miércoles, 15 de abril de 2009

lunes, 30 de marzo de 2009

Lugar o no lugar

Cuando bajé la mano por última vez sobre las seis cuerdas precisando el acorde que marca el final de Something, ella se pasó el dedo gordo por los ojos tratando de secarlos.
El ruido del camión de Cliba compactando la basura interrumpió mi impulso por decir lo que estaba pensando.
Ana estaba quieta. Sentada sobre sus talones miraba hacia la biblioteca y se tocaba el pelo de la misma forma que la tarde en que habíamos coincidido por primera vez. En un bar de la cañada ella se había tocado la punta del flequilllo, lo había mirado y sin dejar de hacerlo dijo: "Ni en pedo vuelvo a vivir en un pueblo."
Dejé la guitarra sobre el sillón y me fui al baño. Ella siguió con su mirada, sin foco, sobre el mismo lugar o no lugar.
Me lavé la cara. Me miré en el espejo. Me senté en el inodoro.
El camión de Cliba ya había puesto segunda y el sonido del motor comenzó a fundirse.
Cuando el silencio volvió también lo hizo la angustia que había tenido minutos antes, en el medio del cuerpo, mientras silbaba la canción de Harrison.
Abrí la puerta del baño y me abrazó, con el cuerpo y sin soltarme me dijo:"Bueno, probemos."

lunes, 23 de marzo de 2009

A Vittorio

Las nubes no son la nieve. Tampoco es algodón. Todos los agujeros tienen un fondo o casi todos. El hielo también quema. Los caballos duermen parados. Los truenos sólo son ruidos. Los pingüinos no tienen pantalones largos. En los aljibes solo hay agua. El cuco no está en el ropero porque no existe. Los pedos se pueden prender fuego. Del otro lado del mar hay otra playa. A los monos les gustan las bananas pero también comen otras cosas. No hay gente adentro de la televisión. Al helado hay que comerlo despacito. La tinta de la lápicera es difícil de borrar. Los sapos fuman pero cuando lo hacen explotan. Si soltás un globo se va y no vuelve. Los Boomerang si. Los loros pueden hablar. A la coca cola tomala siempre fría. Las vacas te miran desafiantes pero no hacen nada. Los caramelos media hora no duran media hora. Además son feos. Saludá amablemente a las viejas, aunque parezcan brujas, sonreíles. Hay chupetines que adentro tiene chicles. Si te tragás un chicle no te pasa nada. En los sueños nunca van a hacerte daño. Los perros ven en blanco y negro. También hay mucha gente buena, buscálas y quedáte cerca de ellas. La música es misteriosa, yo todavía no sé bien que es. Explorala entera.
Los gnomos no aparecieron en mi patio. Los perros nunca me contestaron. Una vez vi un caballo blanco pero le faltaba el cuerno en la frente. Estuve rodeado de luciérnagas pero no tenían varita. Me sumergí en el mar pero no encontré ningún tesoro. Miré muchísimo para arriba pero nunca ví un ovni. Jamás pude viajar en la mano de algún gigante.
No sé si estas cosas existen. Tal vez si. Si algún día veo algo te lo cuento. Suerte en tu búsqueda, no pares nunca.

sábado, 21 de marzo de 2009

27 de abril casi Buenos Aires.
Domingo a la siesta.

jueves, 19 de marzo de 2009

Encuesta

Teniendo en cuenta la cara de verga que tiene Thom Yorke.
¿Que hubiese sido de él sin Radiohead ?



lunes, 2 de marzo de 2009

miércoles, 18 de febrero de 2009

Nunca confíes en una persona con cara de búho.

domingo, 15 de febrero de 2009

miércoles, 11 de febrero de 2009

lunes, 2 de febrero de 2009

domingo, 25 de enero de 2009

La noche que decidí huir de mi pueblo era Martes. Una noche de mierda, por ser martes y porque no llovía: lloviznaba, y la llovizna lo único que hace es romper las pelotas, como lo hacían mis compañeros de trabajo y algunos de mis amigos. Es más: ahora que lo pienso mejor, en ese pueblo todos me rompían las pelotas. No es fácil ser enano en un lugar tan chico. Nunca nadie me llamó Rodolfo; para ellos era "Bonsai". Es difícil liberarse de un apodo en un pueblo. Una vez que hay consenso popular, te acompaña hasta la muerte. Incluso suelen ser hereditarios; el apodo pasa de generación en generación, pero en diminutivo. Por ejemplo Francisco es "Pancho", el hijo de Francisco por más que no se llame así será "Panchito" y el hijo de "Panchito" será "Panchín", y así sucesivamente. Sin embargo hay un par de reglas tácitas: sólo los hijos primogénitos llevan el apodo del padre, por una cuestión funcional; sino habría que agregarle números romanos y eso es exclusividad de la iglesia. A su vez, el primer Francisco siempre será recordado en los bares como el "Pancho Padre". Es como una forma de copyright. Bueno: yo era el "Bonsai" desde tercer grado. Ese apodo me lo puso "Camerún". Le decían así básicamente porque era negro. No es fácil ser negro en un pueblo de piamonteses. Es más, me atrevería a decir que es más difícil que ser enano. La noche de mi huída habíamos comido un asado en el galpón del "Tripa" Cantamuto. Le decían así porque tenía una pija enorme. Todos los lunes a la noche nos juntábamos a jugar al fútbol y después a comer. Esa noche vino un ingeniero agrónomo de Rosario que se había venido a trabajar al pueblo. Lo trajo el "Citro" Canello. Le decían así por el tamaño de sus orejas. "Citro" era una abreviación de "Cara de Citroneta con las puertas abiertas". Cuando vi entrar al rosarino (agachándose para pasar por debajo del marco de la puerta) tomé la decisión de inmediato. Esa noche comí en silencio. En la sobremesa tomé un vaso de ginebra y a las doce de la noche, en punto, me levanté sin hacer ruido, junté mis platos, los metí en la bolsita de nylon y saludé a todos: les di un apretón de mano, a cada uno. Cuando llegué al rosarino lo miré fijo unos segundos, y me fui sin mirar atrás. Caminé por el pueblo vacío, las personas ya dormían. Me crucé con un perro que nunca había visto. Lo acaricié. El animal me miró y me siguió por detrás, a unos metros. Llegué a casa, armé un bolso, ensillé a mi pony y me fui para la oscuridad del campo. El perro me siguió. Lo bauticé Rodolfo.

domingo, 18 de enero de 2009